Más de 400 años y varias generaciones han pasado por Mas Gran de Cruïlles.
Fuimos un convento de benedictinos.
Refugio en tiempos de guerra.
Cobijo de grandes intelectuales en épocas de bonanza.
Casa de arte, antigüedades y moda.
Inspiración de una gran poetisa.
Y nosotros, la última generación, hemos hecho de un escenario pintoresco, un lienzo en blanco para que diseñes el evento que te representa.
La sencillez del campo, el mimo de una familia, las posibilidades de un gran espacio, y las facilidades de los mejores anfitriones te esperan si has decidido crear recuerdos y cambiar la vida de muchas personas.